En ocasiones queremos ocultar los azulejos de la cocina, bien porque están viejos, bien porque están sucios, o porque los azulejos de la cocina son blancos y la cocina también, de modo que queremos romper de alguna manera parta que no parezca la cocina de un hospital. Una buena opción son los salpicaderos de madera.
Cada vez encontramos más proyectos en los que los nuevos propietarios de una casa vieja, quieren preservar los azulejos cuadrados clásicos, que le dan una imagen retro a la casa que -combinada con mueble de vanguardia de Goterris- es espectacular. Sin embargo, las juntas de estos azulejos están dañadas sobre todo en la zona de cocina. Puesto que no se quieren quitar, lo ideal es taparlos.
Para ello no recomendamos emplear láminas adhesivas, que tienen una vida muy corta y acaban dejando restos en las paredes. Lo ideal es utilizar madera de barco que es resistente a las salpicaduras y líquidos, que es súper fácil de limpiar porque no tiene juntas, y que da un toque cálido a la cocina. La madera de salpicadero es, además, más económica que la cerámica y más barata de instalar.
Debajo podéis verla instalada en un proyecto de Docrys & DC.