Cada vez están más de moda los hornos con una anchura de 90 cm. El motivo es triple: la capacidad, el ahorro energético y la estética.
La capacidad
Los hornos de 90 cm tienen una capacidad enorme frente a los habituales de 60 cm, lo cual permite cocinar mejor más producto. Es decir, puedes -por ejemplo- cocinar dos pizzas a la vez a la misma altura, de modo que no tengas una poco cocinada y otra casi carbonizada. Puedes, además, hacer asados de gran tamaño, como cochinillo, no aptos para hornos de dimensiones convencionales.
Lo bueno de estos hornos es que, en la mayor parte de los casos, no son altos. Aunque fabricantes como Cata sí producen hornos anchos y altos -casi industriales-, otros como Bosch o Siemens tienen amplísimos de solo 45 cm de alto.
Además, estos hornos deben integrarse en columnas más amplias que, a la vez, tienen más capacidad de almacenaje.
El ahorro energético
Se acabó tener que cocinar en dos tongadas. Si eres de los que cocina para muchos, podrás aprovechar el calor de un horneo para todos tus platos, habida cuenta de la capacidad del horno.
Sí que es cierto que estos hornos -de una calidad magnífica- tienen un precio bastante más elevado, que ronda los 1.200 euros, pero con el precio de la energía actual, los vas a rentabilizar pronto.
La estética
Elegir un horno estéticamente atractivo es vital para una cocina. La columna de cocción de la cocina -donde se integran el horno y el microondas- atrae todas las miradas, al hacer un efecto espejo. Por lo tanto, cuanto mayor sea el cristal, más llamativa la columna. Es, en realidad, el mismo efecto que hace un televisor en el comedor de casa: una tele de 65 pulgadas es mucho más llamativa que una de 32, y le da un aspecto muy posh a la habitación.
Bien es cierto que los hornos amplios no suelen llevar monomando, sino doble mando, que es un poco más feo. Smeg fabrica hornos sin mandos, totalmente digitalizados, todavía más estéticos.